El miedo no es miedo.

A ti, 

al que ahora le aprietan menos los lazos,
al que habla el lenguaje de las plantas,
Dime,
¿donde quemas en estos dias tus sueños?
¿donde quedaron los "yo sin ti"?
¿Donde viajaron los sueños de tus vientos?
Si,
nadie lo sabe,
pero yo si.
Nadie como yo conoce el sentido del dolor

en perfecto cóctel con el honor.
Nadie como yo sabe lo oscuro y frío de una pérdida.
Nadie como yo sabe de silencios espectrales en unos labios,
ni de ver quemar, arder, consumir tus propios sueños.
Que duro fué decir adiós a mi patio,
a buscar contigo tesoros entre las macetas,
a tocar hadas invisibles,
a dibujar paisajes nuevos.
Y en tu recuerdo, he dormido,
porque fué el mejor lugar para descansar la muerte de sentir.
A ti,
Diablo aparente vestido de ojos de agua...
hombre con forma de cuchillo,
sueño de mi carne,
tú, mi propia vida.
Tú, que sangras en rojo como homenaje a la oscuridad de mi pelo,
tú que nunca te atreviste a doblar mis líneas rectas.
A ti,
a ti te digo,
que la verdad brilla clara hoy.
Que a pesar de tanto dolor,siempre estarás conmigo.
que convertí mi amor por ti en otro hígado
que hoy vive en mi cuerpo,
para transformarme así en algo diferente,
sin secuelas.
Sin reproches.
Hoy camino,
y escribo de amores,
de corazones gitanos,
de tangos en tus brazos,
de campos verdes con la esperanza de tu lectura,
de un cielo que también a ti te cubre,
y tú, siempre presente.
Hoy, vivo,
y debo contárte
todo lo que es mio de ti,
tuyo de mi...


No se pierde lo que no muere.
Mientras yo siga respirando...