Para que?

Ella se levanta, totalmente adormilada.. pensando en pájaros... vuelos, nubes y algún que otro escarabajo.
Bajando las escaleras encuentra un papel, restos de un cargo de tarjeta de crédito que en otro tiempo fue mejor... la compañía...
Se pregunta, ¿De donde ha salido este pedacito de papel?
Entra en su cocina, de cabeza a su dosis de cafeína matutina, ya que es incapaz literalmente de pensar, y empieza a sorber lentamente ese liquido negro y humeante que la hace volver a su dura realidad...
Pobre niña...
Dando un repasito general aparece su nombre... se estremece.. ¿aun lo recordamos verdad niña?
y con los brazos cubre su cabeza intentando que se aleje de ella... que no vuelva más.
Y regresa siempre...siempre.
Fue su dios, se dijo que no perdería su vida otra vez por amarle hasta caer... tantas bocas después..

Querido Carlos.. termina esta historia... atrévete. Eres muy especial. Besos.